“Gracias a la confianza del Ing. Miller Salazar junto a su familia, se da mi vinculación a este prestigioso Club en el año 2014”
El ídolo ambateño es una Institución que se encarga de reclutar personal profesional también fuera de la cancha, la institucion tiene enfoques en los logros deportivos y también los administrativos, y reconocemos que la incorporación de personal capacitado permite el crecimiento y logro de metas. Uno de los colaboradores que destacamos en este artículo, nos acompaña desde hace 7 años al Club.
Javier Jiménez Jima, Ingeniero en Contabilidad y Auditoría, se vinculó al ídolo ambateño en el 2014 en calidad de Asistente Contable. Es un trabajador que conoció desde cerca la situación económica que vivía el plantel celeste en la serie B, también fue cultivador de los frutos que gracias al trabajo constante de todos los involucrados permitieron que el Club Deportivo Macará de Ambato resurja y, logre consolidarse como una entidad seria y comprometida el desarrollo deportivo a través de su princial disciplina que es fútbol.
Desde su carrera universitaria se vinculó al ámbito financiero en el Club y el equipo de colaboradores ve en él, el desarrollo profesional, Javier manifestó: “El fútbol es un mundo aparte, lo que uno estudia en el Universidad se ve cuestionado al momento de aplicarlo en una entidad deportiva, ya que la legislación vigente no es la misma que una empresa convencional, gracias a las capacitaciones que brinda la Liga Profesional de Fútbol y la Federación Ecuatoriana, he aprendido el funcionamiento financiero de una entidad deportiva, cumpliendo todos los requerimientos con las entidades de Control del Estado Ecuatoriano”.
Para Jiménez trabajar en Macará no es coincidencia, pues su familia se identifica con los colores del ídolo, razón por la que están pendiente de cada partido, observando al equipo y su desempeño, sin importar los resultados. Sobre sus características dentro de su lugar laboral enfatizó: “Me considero una persona alegre y sobre todo descomplicada, trato de buscar soluciones a los problemas que se presentan en el aspecto financiero o en las actividades cotidianas del Club, al final de la jornada entre más problemas se haya solucionado me siento con la satisfacción del trabajo cumplido”.
En cuanto a sus aspiraciones personales dijó: “Ser buena persona es la mayor aspiración que un ser humano debe tener, es algo que el dinero no puede comprar, por más títulos o dinero que alguien tenga, si no es buena persona eso no sirve de nada, antes que buenos profesionales seamos buenas personas, el mundo necesita más amor, hay que mejorar día tras día” mensaje que la familia celeste lo guarda con todo el cariño.
Javier Jiménez en el mensaje final para la juventud expresó: “A los jóvenes les digo que luchen por sus ideales y sus sueños, se eduquen los mas que puedan, ya que solo con una buena educación podemos tener un país mejor, una buena calidad de vida para nosotros y nuestra familia, valoren el esfuerzo de nuestros padres por vernos siempre bien, seamos respetuosos y traten a los demás como les gustaría ser tratado. Cultivemos la paz y la tranquilidad.”
¡Te agradecemos Javi por todos los años que nos acompañas y el compromiso laboral con el Club!
Por: Danna Esterilla
Edición: Gabisa Salazar P.